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#MeToo puso sobre la mesa una discusión colectiva sobre lo que debemos entender por acoso

  • 28 Nov 2022
  • 28 Nov 2022
  • 28 Nov 2022
Aprendizajes y retos de este movimiento en FIL Pensamiento

Con la pregunta ¿Tiene futuro el #MeToo? Inició la discusión en torno a este fenómeno que se creó recientemente y que inundó las redes sociales con señalamientos de mujeres que han sufrido acoso y que durante años se mantuvieron en silencio.

Con más preguntas que respuestas transcurrió este intercambio de ideas, Gilles Lipovetsky, autor francés del libro “La era del vacío” abrió la discusión al considerar que “este movimiento inició porque las mujeres encuentran insoportable ser agredidas”.

Susan Crowley como moderadora dejó sobre la mesa una serie de preguntas que abrieron el análisis en las que persisten las dudas, pero también grandes enseñanzas como el hecho de que el movimiento #MeToo dejó al descubierto la deuda histórica que el Estado y la justicia tiene con las mujeres del mundo, latinoamericanas y mexicanas, así lo dijo el experto en temas de Medio Oriente, Maruán Soto.

“En este país sí se mata a las mujeres por ser mujeres. México es el segundo país en Latinoamérica con mayor número de feminicidios, todas las violencias públicas, empiezan con violencias privadas. Las estructuras de justicia y la ausencia del Estado son fenómenos que llevaron a la consolidación del fenómeno #MeToo y tengo que decir que no me gusta, pero debo entender que trata de suplir una ausencia absoluta del Estado en el caso de México”.

Maruán Soto refirió que en México se asesinan 11 mujeres y niñas todos los días, el porcentaje de impunidad está arriba del 90%, la mayor parte de esas violencias no pertenecen a #MeToo “pero cuando la violencia es tanta, tan generalizada, es socialmente difícil que se diga que no es lo mismo el #MeToo que el feminicidio, que la delincuencia organizada porque se suman al conjunto de violencia de género”.

La experta en temas de género, Luz Ángela Cardona Acuña explicó que #MeToo es una expresión de hartazgo “porque somos muchas las mujeres que hemos vivido formas de violencia y el #MeToo llega como una forma para darle voz a mujeres”.“La denuncia anónima de acoso sexual, violencia sexual, acoso laboral y violencia contra la mujer irrumpe en las redes sociales como una forma de decir: estamos cansadas, no estamos plenas, no estamos satisfechas con lo que el mundo nos ofrece como mujeres”, señaló.

Cardona Acuña estimó que la discusión de #MeToo puso sobre la mesa un debate colectivo sobre lo que debemos entender por acoso y dejó una serie de preguntas, aún sin respuesta: “¿Cuándo vamos a acusar a alguien de que nos acosa, cuándo somos conscientes de que nos acosa o que acosamos a alguien, es legítima la denuncia anónima, es la manera que se deben reivindicar derechos, qué pasa con la presunción de inocencia y el debido proceso para los presuntos acosadores, qué derechos tienen los hombres señalados de acoso?”

La experta en temas de género cuestionó si es deseable sustituir la aplicación de justicia a través de medios institucionales “para aplicar justicia por mano propia en redes sociales, ¿así queremos construir colectivamente una forma de justicia?”.

Lo que sí existe tras este movimiento que se ha desarrollado especialmente en redes sociales es una serie de acuerdos en los que cada vez más, las mujeres tienen claro que: “El consentimiento es importante cuando se trata de relaciones afectivas, eróticas y sexuales; la violencia contra las mujeres es inaceptable y las instituciones públicas nos han fallado a todas las personas no solo a las mujeres”.

A manera de conclusión se expuso la necesidad de crear un #MeToo democrático, horizontal abierto y dispuesto a la confrontación, al diálogo, a la diferencia y a decir que no estamos de acuerdo.
 
Atentamente
“Piensa y Trabaja”
“2022, Guadalajara, Hogar de la FIL y Capital Mundial del Libro”
Tepatitlán de Morelos, Jalisco.
28 de noviembre del 2022
Texto: Zaira Y. Ramírez
Fotografías: Refugio Ruiz